Con el paso del tiempo y la disminución de estrógenos, las paredes de la vagina se adelgazan y pierden su elasticidad y lubricación natural volviéndose más propensas a la inflamación. El sólo roce de sus paredes al caminar, hacer trajín o con las relaciones sexuales pueden generar cuadros de dolor pélvico, sangrado, dolor, ardor o escozor vaginal, infecciones vaginales y cistitis recurrentes. Recuerda que es importante ir al médico de manera periódica. Una mujer informada es una mujer preparada para enfrentar cualquier situación de la mejor manera. 3 consejos claves de tus amigas del Club Phytosoya son: Aceptación, amor propio y comunicación. Con una buena actitud ante la menopausia todo es más simple. No olvides registrarte si deseas ser parte del club y recibir contenido exclusivo para la salud de la mujer. ¡Besos! Referencia bibliográfica: Nappi RE, Davis SR. The use of hormone therapy for the maintenance of urogynecological and sexual health post WHI. Climateric. 2012;15(3):267-74.